sábado, 30 de abril de 2016

Joaquín Sorolla y Bastida, pintor español impresionista

                                                                    Paseo a orillas del mar (Joaquin Sorolla, 1909)




Joaquín Sorolla y Bastida pintor español impresionista más prolificos con más de 2200 obras catalogadas, nacido en Cercedilla, Valencia, el 27 de febrero de 1863 y murió el 10 de agosto de 1923.
http://es.wikipedia.org/wiki/Joaqu%C3%ADn_Sorolla
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/s/sorolla.htm
http://www.biografica.info/biografia-de-sorolla-joaquin-2294
http://www.pintoresfamosos.cl/obras/sorolla-bastida.htm
http://www.youtube.com/watch?v=lEVoHC4Ff9Q


Es uno de nuestros pintores favoritos y sobre todo cuando pudimos disfrutar de la exposición Visión de España.  

miércoles, 11 de febrero de 2015

Ahora lo dice la ciencia. Psiconeuroinmonología




Hola, :-)

hace un año que no vengo aquí. Por infinidad de razones y ocupaciones, todas positivas. No nos engañemos, hay días también mediocre, pero sigo estos consejos. Y todo va bién. Ya no son cuentos de unos pocos iluminados: ahora lo dice la ciencia.

Ahora lo dice la ciencia. Haz clic aquí :

sábado, 1 de febrero de 2014

Sobre llevar los niños a la guardería

Sobre llevar los niños a la guardería: 



Soy firmemente partidaria de llevar los niños a la guardería. No sólo por la utilidad que supone para las madres y los padres el poder dejar a los niños allí e  irse a trabajar o lo que les convenga, sino porque allí se sientan parte de las bases de futuros aprendizajes.

Cuando los bebés empiezan a andar, los horizontes se amplían de manera insospechada para ellos y todo lo quieren descubrir, tocar, aprehender…. Tooodo, hasta lo más peligroso…y si no,  recordad las conversaciones entre mamás de “me abre todos los cajones”, “me lo toca todo”, “no puedo dejarle nada al alcance de su mano”. De pronto el mundo se ha convertido en un lugar  (para nosotras mamás prudentes) peligroso…En cambio para ellos se presenta un mundo maravilloso para descubrir. Todo lo quieren tocar, a ver qué textura tiene, a ver si cuando lo lanzas al suelo hace ruido, a ver si se puede apilar, a ver cuánto pesa, a ver qué colores tiene…Observad a un niño pequeño descubrir el mundo, y diferentes objetos. Es apasionante, porque todo para ellos lo es. Imaginad la cocina: ¡cuántas posibilidades!. Ollas de metal, fiambreras de plástico, cubiertos brillantes, trapos de tela… ¡uauuuuu!.  Pensad ahora en un nene que coge una fiambrera de la cocina. Se sienta en el suelo. Observad: la coge, con esas dos manitas y la mira: dos colores, blanco y rojo. Toca: comprueba la textura. Le da vueltas: observa las características. La agita: no hace ruido (excepto si le pusieras un poco de arroz crudo dentro, por ejemplo…) La golpea contra el suelo. Finalmente, se la lleva a la boca: no sabe a nada la fiambrera esta de plástico….Y  hala, a otra cosa…. Y así todo el día….¡tienen trabajo! Hay muchos objetos en la casa…. Para ellos todo  son objetos interesantes y además,  al principio no hay diferencia en su actitud de descubrimiento entre lo que son juguetes y lo que no.

¿En qué etapa llevar a los niños a la guardería? Para mí,  lo ideal es desde cuando empiezan a andar hasta que empiezan en la escuela infantil con tres años.

 ¿Y por qué llevarlos, si no me hace falta? Hay tres principales razones según mi opinión:

La primera razón es porque los niños han de jugar con otros niños. La socialización que supone para un niño pequeñito el ir a la guardería no la va a tener si lo criamos exclusivamente en casa y paseando por el barrio.

La segunda razón es que en las guarderías  el espacio está adaptado a sus necesidades de desarrollo. En las aulas,  el espacio suele estar organizado en zonas de juego, por temáticas, que pueden ir cambiando a lo largo del curso, según los contenidos que se trabajen: una zona de puzzles, otra de muñecas, otra del otoño (o de cualquier otra estación), otra de cuentos, otra para pintar… y según el horario y programación, se deja ir a los niños a donde ellos quieren, por lo tanto aprenden y descubren a su ritmo. Como lo hacen a su ritmo, aprenden seguro. Aún me pregunto cómo esta idea no se aplica masivamente luego,  desde la escuela infantil hasta el bachillerato….

La tercera razón es que aunque parezca que “no hacen nada”, en realidad aprenden hábitos básicos de higiene y convivencia. Quizá a muchos de nosotros, adultos sabelotodo, no nos entra en la cabeza, pero es que un niño pequeño ha de aprender a lavarse las manos, a ir al baño correctamente, a permanecer sentados en sus sillitas cuando la maestra vaya a contar un cuento… son cosas que vemos tan básicas y automáticas que quizá no caemos que hay que aprenderlas. Los buenos hábitos de este tipo fomentan la autonomía, muy deseable para estos geniales pequeñitos. Además,  que sepan hacer las cosas por ellos solitos les sube mucho la autoestima, les da seguridad, les posiciona en un estado mental de seguir aprendiendo y seguir prestando atención a tantas y tantas normas sociales que les imponemos… En las guarderías y escuelas infantiles se fomenta y enseñan todos estos hábitos de higiene y buen comportamiento social.

¿Quién da más?

Pues ya sabeis… :-)

Mar Sánchez Padilla




miércoles, 15 de enero de 2014